viernes, 28 de julio de 2017

El pleno de ayer

Estuve en el pleno ayer. Al llegar allí (tarde, como siempre) estaban hablando de la casilla de aperos (de unos 35 metros cuadrados) que se está construyendo en suelo rústico, y por la que Noelia de Vecinos preguntó en el último pleno.

Miguel Angel Núñez, concejal de Cultura, Festejos y Juventud, explicó que la casilla era suya, que al empezar a construirla se dió cuenta que no iba a caber allí el remolque y otras herramientas, y que por eso decidió hacerla más grande. Expresó también su sorpresa de que su casilla había levantado tanto revuelo, cuando hay otras muchas que no cumplen la normativa.

El Alcalde también aclaró que la obra está parada, a la espera de que se presente un proyecto. "Se puede hacer, simplemente necesita un proyecto", según Armando.

Personalmente no conozco a nadie que se tome la normativa tan a la ligera, sin ser amigos del Alcalde o de algún concejal del PP, y sin renunciar a nuestro derecho a cuestionar publicamente cómo se hacen las cosas en el pueblo.

De hecho, hablando Noelia y yo con Miguel Angel después del pleno (los plenos siguen sin tener un espacio donde los vecinos podamos hacer preguntas o sugerencias), insistíamos en que lo correcto sería proponer una modificación de las normas, si un concejal considera que 15 metros es demasiado poco para una casilla de aperos. Pero las normas tienen que aplicarse igual para todos; esto es un principio básico en una democracia, pero creo que todos conocemos muchos ejemplos de que esto no se cumple en nuestro pueblo.

Otro asunto que se trató fue el "Punto Límpio" en La Barranca, que parece dificil mantener minimamente limpio y ordenado. Según el Alcalde se van a retirar los contenedores de papel y vidrio, aunque los cubos de basura doméstica sigan allí.

Y creo que no se habló, pero un amigo mío me ha comentado que a pesar de la cantidad de gente que hay en esta zona en verano, el ayuntamiento sigue sin instalar ningún aseo, con lo cual la gente hace sus necesidades por cualquier parte, lo que está convirtiendo este lugar -que fuera de temporada de verano es bastante bonito para pasear- en uno bastante asqueroso.

También se habló del problema del "Botellón" (que según una mujer en el público puede convertirse en algo insoportable para los vecinos que viven cerca). Me volvió a llamar la atención la gran permisividad que hay en cuanto a algunos fenómenos, y lo duramente que se persiguen otros (como la presencia de perros en los parques, ver mi entrada de hace unos días). Según el Alcalde, el "Botellón" es "algo cultural, que es imposible erradicar"  ("todos hemos sido jóvenes" es una frase que ya he oído en varios plenos...), y "el que quiera, respeta".

En fin, este pleno, como suelen hacerlo casi todos, me ha vuelto a confirmar tres de los principales problemas de Navaluenga:
- No se fomenta la transparencia y la participación de los vecinos (ni de los representantes de la oposición).

- No hay normas claras que se apliquen igual para todos.

- En lugar de organizar el pueblo, y dedicar recursos, a que sea un buen lugar para vivir durante todo el año, y a cuidar la gente que tienen casa aquí y vienen regularmente, se fomenta un turismo muy masificado, que beneficia a algunos y suponen graves molestias para muchos otros.

Lena
 



No hay comentarios:

Publicar un comentario