jueves, 21 de abril de 2016

El pleno extraordinario sobre el campo de golf

A la una menos cuarto salí del pleno extraordinario, donde se debatía sobre la gestión del campo del golf desde las 10. Todavía no había terminado.

No voy a referirme mucho aquí al repaso que dió Isodoro, de Vecinos, sobre todos los incumplimientos (laborales, fiscales, y hacia el Ayuntamiento de Navaluenga) de la Fundación de Golf de Castilla y León, y como el Ayuntamiento dejó pasar. Para eso recomiendo leer lo publicado en Plazanavaluenga.

Salí bastante cansanda y desanimada; no sólo por la habitual confrontación, y por oír a Armando hablar de la "responsabilidad hacia los vecinos", sino también por constatar que no hay ningún grupo político en Navaluenga que a mí, y gente que conozco, nos representa en esta cuestión.

Tanto Vecinos como el PSOE insiste en que no están en contra del campo de golf, sino que es la GESTION de dicho campo que critican. Armando habla de lo deseable que sería tener un campo de 18 hoyos, para poder formar parte del "Circuito nacional"; dice que ahora no es el momento, pero quizá en el futuro sí, si vuelve la bonanza. Emfatiza las palabras NUESTRO, y DE TODOS, cuando habla del campo.

Pues yo, que no represento a nadie más que a mí misma, quiero dejar constancia aquí que no tengo absolutamente ningún cariño al campo de golf, que me parece que fue una malísima decisión de convertir un campo y pasto natural precioso en la artificialidad de un campo de golf, con el coste económico y ecológico que su construcción y mantenimiento conllevan. Personalmente para mí sólo significó la pérdida de un paisaje  hermoso donde solía pasear.

Esta tendencia de centrarse en las obras pretenciosas, como un campo de golf, con "greens" que se estropean en tres días si no se cuidan y cuya recuperación cuesta 18.000 euros (según información dada por el alcalde en el pleno), mientras no tenemos ni una biblioteca en condiciones, ni locales públicos donde organizar reuniones y charlas, y los caminos rurales se pierden porque las zarzas los cierran, me parece tristemente característica de la política en Navaluenga.

Antes de terminar (por ahora), otra cita de Armando, en respuesta a Noelia que subrayó la importancia de la cuestión, recriminando las risitas de Armando y Pilar durante la exposición de Isidoro: "todo lo que se trata en este ayuntamiento es importante; el campo de golf no es más importante que un bache delante de la puerta de cualquier vecino".

Al pasar por los cientos de baches, charcos y barrizales para llegar a mi casa (aunque si eso es el precio para vivir en el la naturaleza, lo pago con gusto), he pensado que resulta bastante ilustrativo de la poca importancia que Armando ha dado a las irregularidades de la gestión del campo de golf.

Lena

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