Acaba de llamarme María, vecina de la calle Pablo VI, sobre la que escribí aquí el 15 de febrero de este año.
Estaba todo indignada, y lo entiendo.
Ella y sus vecinos habían tenido cierta esperanza de que a final el Ayuntamiento fuera a arreglar a su calle, que en mi texto anterior describí como "una alfombra de clavos".
Y resulta que ahora, según me cuenta ella, se ha asfaltado el camino de tierra que había más abajo (un camino de tierra perfectamente transitable), pero justo donde empiezan los clavos (y ¡qué coincidencia! donde algunas de las casas son de personas con vínculos a la oposición...) termina el nuevo (y liso) asfalto.
Ya no hay dinero.
Esto, o es maldad, o es una muy mala utilización de los recursos.
En la calle del Sestil se han asfaltado dos calles, en la que vive Juanjo el calefactor, que curiosamente va en su lista, y donde vive Pili "la Choro" y Santi "Caminero", Merce y el hijo de "tia Maria la Sanjuañega", el enterrador, etc...; no entiendo como el Ayuntamiento ha actuado dejándose en evidencia, ya que cuando un@ actúa malamente al final se le vuelve en contra, así es la vida,más tarde o más temprano nuestras actuaciones nos pasan la factura correspondiente.
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