domingo, 15 de enero de 2017

Las ruínas del siglo XXI

Foto: Lena Pettersson

En la revista Interviú, del 9 de enero 2017, hay un reportaje sobre Ávila: “ÁVILA. RUÍNAS DEL SIGLO XXI” con el subtitular “Entre esqueletos de hormigón, la ciudad con más viviendas vacías de España no digerirá su burbuja inmobiliaria hasta el año 2061”.

Como no está en abierto (a nosotros nos lo han enviado por estar entrevistado un compañero de Equo Ávila), y por si hay alguien aparte de mí a quien le resulta absurdo ver tanta mujer desnuda o semidesnuda entre serios reportajes, voy a resumir el contenido aquí.

En tres Planes Generales de Ordenación Urbana (de 1998, 2005 y 2010) el Ayuntamiento de Ávila proyectaron dar cabida a una población de 100.000 habitantes, casi doblando los 58.000 censados. El último plan aumentaba el suelo urbanizable en más de tres millones de metros cuadrados, y preveía más de 11.000 nuevas viviendas. Incluía una estación de AVE, un hospital nuevo, un polígono industrial...Se pensaba que iba a ser una “ciudad dormitorio” para gente que iría a trabajar a Madrid, o una area de distribución logística. Y sin embargo, según Yolanda Vázquez, portavoz del grupo municipal socialista en el Ayuntamiento de Ávila, “No había planes ni políticas que apoyaran ese esperado crecimiento de población hasta 100.000 habitantes”.

No se cumplieron los deseos de los políticos: en 2011, según el Instituto Nacional de Estadística, Ávila era la capital con mayor porcentaje de viviendas vacías de España: de un total de 34.465 viviendas, más de 8.000 (casi una cuarta parte) estaban sin ocupar, la mitad de ellas de construcción nueva.

En 2015, según el Ministerio de Fomento, se vendieron en Ávila 61 viviendas. Como subraya la revista, a este ritmo, la ciudad no digerirá su stock inmobiliaria hasta el año 2061.

Así que esta quimera urbanística ha creado grandes barrios “fantasma”, de edificios vacios o a medio contruir, y donde antes había campo ahora hay calles con señales de tráfico, pasos de cebra, y casetas de electricidad inútiles. El reportaje termina citando a nuestro compañero Juan Carlos Rico, de Ecologistas en Acción (y de Equo):


Se han hecho barbaridades: se han tapado lagunas, asfaltado cauces, talado árboles para poner hormigón. El Ayuntamiento creó montones de jardines que se dejan morir porque no se mantienen. Es desolador”.

1 comentario: